10 de noviembre: Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo
El lema para 2021 es “Construyendo comunidades preparadas para el clima”. La física es clave para comprender y predecir nuestro clima cambiante. Las herramientas de la física permiten comprender procesos ligados al sistema climático de la Tierra, que abarca la atmósfera, los océanos y la criosfera.
El Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo es un evento anual que se celebra en todo el mundo desde el año 2002 para recordar el compromiso asumido en la Conferencia Mundial sobre la Ciencia, que se celebró en Budapest en 1999, bajo el auspicio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Consejo Internacional para la Ciencia (CIC).
Su propósito es renovar el compromiso, tanto a nivel nacional como internacional, en favor de la ciencia para la paz y el desarrollo, y hacer hincapié en el uso responsable de la ciencia para el beneficio de las sociedades, en particular, para la erradicación de la pobreza. El Día Mundial también tiene por objeto lograr una mayor concientización en la opinión pública sobre la importancia de la ciencia y colmar la brecha existente entre la ciencia y la sociedad.
LA CIENCIA, UN DERECHO HUMANO
“Toda persona tiene derecho a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas…” Artículo 27, Declaración Universal de los Derechos Humanos, París, 1948.
La Ciencia es un Derecho Humano. Así lo reconocen además el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1966). A nivel interamericano, la Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre (1948) y el Protocolo de San Salvador sobre Derechos Económicos Sociales y Culturales – DESC (1988), también lo hacen, sumando también al progreso tecnológico en la declaración.
Ciertamente y a pesar de figurar como derecho desde hace tiempo, la Ciencia ha sido poco considerada como tal. La necesidad de desarrollar este aspecto es de especial relevancia para oponer resistencia a movimientos negacioncitas del conocimiento (terraplanistas, antivacunas, …) y las pseudociencias. Los avances científicos y tecnológicos presentan cada vez mayor impacto sanitario, político, ético, social y ambiental y por lo tanto toda persona debe poseer las herramientas necesarias para aprovechar el avance de la ciencia y la tecnología en su provecho y el de la Sociedad y oponerse a su uso indebido.
Texto por C.A García Canal
